Autoconocimiento 9 y 10

Autoconocimiento 9 y 10

Parte 9ª y 10ª en audio

Curso de autoconocimiento 09

Alcoholismo y drogas – cómo curar la adicción

En esta lección vamos a aprender sobre los peligros de la adicción al alcohol y a las drogas.
También veremos que, además del alcoholismo y drogas, cualquier tipo de adicción puede ser curada radicalmente. Cuando decimos curar radicalmente estamos refiriéndonos a eliminar las causas psicológicas de la adicción, lo que es muy diferente de apenas, como normalmente ocurre, reprimir la adicción, dejando la persona vulnerable a recaídas.

La adicción al alcohol y a las drogas.

Cualquier tipo de adicción se debe a nuestros defectos psicológicos, nuestros Yo.
Esos Yo se mantienen vivos y se alimentan cada vez que cedemos a la adicción, sea fumando un cigarrillo, ingiriendo alcohol o utilizando algún tipo de narcótico o substancia alucinógena.
A pesar de no ser tratado específicamente aquí, otros tipos de adicción como el juego, la prostitución, el cigarrillo, etc., tienen la misma causa, efecto y solución.

Lo más grave es que siempre que alimentamos el ego, éste se fortifica y con eso tiene mayor poder de control sobre el adicto, actuando en su psiquis y sobre su organismo, obligando a esa persona a caer nuevamente en la adicción y así alimentar ese defecto.

Es fácil concluir que eso se torna una “pelota de nieve”, un problema que inicialmente era pequeño se transforma en algo totalmente sin control.
Por ese motivo es que las personas se vuelven adictas apenas experimentando pocas cuantidades al principio, pues creen que pueden dejar la adicción a cualquier hora.
Eso es un gran error, ya que mismo con esas pequeñas cantidades el defecto psicológico ya está creado y alimentado y muy lentamente, se va robusteciendo y envolviendo su víctima, hasta tener control sobre esa persona.
Cuando ella se da cuenta del problema la adicción ya está muy fuerte.

El alcoholismo.

La adicción al alcohol, el alcoholismo, trae terribles consecuencias para el adicto. Además de los conocidos maleficios que van desde la cirrosis a la alucinación y locura, el alcohol también es desastroso para la parte espiritual.
Lo más peligroso es que el alcohol es tratado como algo sociable, siempre presente en reuniones, fiestas, conmemoraciones y hasta mismo dentro de los hogares, sin distinción de clase social o cultural. El alcoholismo se va infiltrando sutilmente por todas partes.

Con eso vemos a cada año las encuestas indicando que la edad media para la ingestión de la primera dosis de bebida alcohólica por los jóvenes es cada vez menor.
A seguir transcribiremos algunos trechos del libro El misterio del Áureo Florecer, de autoría de V.M. Samael Aun Weor:

“Resulta palpable y manifiesto que el alcohol tiende a eliminar la capacidad de pensar independientemente, ya que estimula, fatalmente, la fantasía y de juzgar serenamente, así como debilita espantosamente, el sentido ético y la libertad individual.
Los dictadores de todos los tiempos, los tiranos no ignoraron qué es más fácil gobernar y esclavizar un pueblo de borrachos que un pueblo de abstemios.
Es igualmente sabido que, en estado de embriaguez, se puede hacer aceptar a una persona cualquier sugestión y cumplir actos contra su honra y sentido moral. Es demasiado notoria la influencia del alcohol sobre los crímenes, sin necesidad de insistir sobre eso”.

Las drogas.

El problema de las drogas es otro flagelo que alcanza a la humanidad, sobre todo la juventud.
Fueron invertidas gigantescas sumas, pero ni así los gobiernos ni la ciencia consiguen encontrar una solución para el problema que a cada día se torna más grave y alcanza a todas las clases.
Solamente como aprenderemos en esta lección es que se podrá resolver ese problema de forma radical y definitiva.
El problema de la adicción es interno y psicológico y debe ser combatido en ese terreno.
Los efectos de la droga son tan devastadores como los del alcohol, sin embargo, son sentidos mucho antes.

¿Cómo curar la adición radicalmente?

Felizmente dentro del ser humano existe un poder latente capaz de extirpar de su interior cualquier tipo de adicción.
Como usted ya debe estar imaginándose, si la adicción es debida a los defectos psicológicos el medio para eliminarla es la muerte psicológica.

Además de la dependencia psicológica que la adicción provoca, un otro problema que causa es la dependencia química, pues el organismo del adicto se condicionó a trabajar con esas substancias.
Por eso la mayoría de las veces no es posible dejar la adicción inmediatamente, y en estos casos lo más indicado es combinar el trabajo de la muerte psicológica con la reducción gradual de la substancia de la cual se es dependiente.

Vea abajo un ejemplo que puede ser utilizado en la práctica:

Supongamos que determinada persona está habituada a ingerir por día 20 vasos de bebida alcohólica.
Esta persona debería disciplinarse para, durante una semana, ingerir lo máximo de 19 vasos de bebida por día, y toda vez que ella sienta ganas o pensase en beber más que eso, ella aplicará la muerte psicológica en estos defectos.
En la semana siguiente ella pasaría a ingerir lo máximo de 18 vasos de bebida por día y nuevamente, toda vez que ella sienta ganas de beber más de esa cantidad, aplicará la muerte psicológica.

Así sucesivamente continuará hasta cuando no esté consumiendo ninguna cantidad de bebida alcohólica.
Siguiendo esa disciplina la persona no sólo dejará de beber, como también no sentirá ganas de hacerlo.

Es necesario que la persona quiera realmente cambiar y pase a dedicarse a eso inmediatamente y continuamente.
De esa forma, seguramente, se libertará de la adicción por más fuerte que ésta sea.

Los sofismas de distracción

Aquí aprenderemos que muchas veces tenemos un comportamiento equivocado aunque creemos que estamos actuando de forma correcta.
A ese tipo de autoengaño le damos el nombre de sofismas y, debido a nuestra inconciencia, acaban por perjudicarnos o mismo impedir nuestro trabajo de despertar de la conciencia, así como pueden también hacernos perjudicar otras personas a nuestro alrededor.

El texto abajo fue sacado del libro “La Revolución de la Dialéctica”, y nos explica muy bien lo que son estos sofismas de distracción:

«Los sofismas son los falsos raciocinios que nos inducen a errar y que son producidos por el ego en los 49 niveles del subconsciente.
El subconsciente es el sepulcro del pasado sobre el cual arde la efímera llama del pensamiento, y donde son producidos los sofismas de distracción que llevan el animal intelectual a la fascinación y por fin al sueño de la conciencia.

Aquello que está guardado en el sepulcro es pútrido y huesos de muertos. Pero la placa sepulcral es muy bonita y sobre ella arde fatalmente la llama del intelecto.
Si queremos disolver el Yo, tendremos que destapar el sepulcro del subconsciente y exhumar todos los huesos y la podredumbre del pasado.
El sepulcro es muy bonito por fuera, sin embargo, es inmundo y abominable por dentro. Es necesario transformarnos en sepultureros.

Insultar a otros, herirlo en sus sentimientos, humillarlo, es fácil cuando se trata- dicen- de corregirlo para su propio bien. Así piensan los iracundos, aquellos que juzgando no odiar, odian sin saber que odian.

Muchas son las personas que luchan en la vida para ser ricas.
Trabajan, economizan y se esmeran en todo, pero el objetivo oculto de todas sus acciones es la envidia secreta, que ellas desconocen, que no sale a la superficie y que permanece escondida en el sepulcro del subconsciente.
Es difícil encontrar en la vida alguien que no envidie la bonita casa, el lujoso automóvil, la inteligencia del líder, el hermoso traje, la buena posición social, la gran fortuna, etc.
Casi siempre los mejores esfuerzos de los ciudadanos tienen como causa secreta la envidia.

Muchas son las personas que disfrutan de un buen apetito y condenan la gula, pero comen siempre más de lo normal.
Muchas son las personas que vigilan exageradamente su cónyuge, pero condenan los celos.

Muchos son los estudiantes de ciertas escuelas seudo-esotéricas y seudo-ocultistas que condenan las cosas de este mundo y no trabajan en nada porque todo es vanidad, pero son celosos de sus virtudes que jamás aceptan que alguien los califique de perezosos.

Muchos son los que odian la lisonja y la alabanza, pero no ven ningún inconveniente en humillar con su modestia al pobre poeta que les dedicó un verso con el único propósito de conseguir una moneda para comprar un pan.

Muchos son los jueces que saben cumplir con su deber, pero también son muchos los jueces que con la virtud del deber han asesinado a alguien.
Fueron numerosas las cabezas que cayeron en la guillotina durante la revolución francesa.
Los verdugos cumplen siempre con su deber. Son millones las víctimas inocentes de los verdugos y ninguno de ellos se siente culpable; todos cumplieron con su deber.
Las cárceles están llenas de inocentes, pero los jueces no se sienten culpables porque están cumpliendo con su deber.

El padre o la madre de familia, lleno de ira, golpea con palos a sus pequeños hijos y no se sienten culpables porque – dicen – están cumpliendo con su deber; aceptarían todo menos que los calificasen de crueles.

Sólo con la mente quieta y silenciosa, sumergidos en profunda meditación, conseguiremos extraer del sepulcro del subconsciente toda la podredumbre secreta que carga. No es nada agradable ver la negra sepultura con todos sus huesos y podredumbre del pasado.
No digamos mi Yo tiene envidia, odio, ira, celos, lujuria, etc. Mejor es no dividirnos. Mejor es decir; yo tengo envidia, odio, celos, ira, lujuria, etc.

Cuando estudiamos los libros sagrados de la India, los estudiamos pensando en el Supremo Brahatman y en la unión del Atman con el Brahatman.
Sin embargo, realmente, mientras exista un Yo psicológico con sus sofismas de distracción, no conseguiremos la suerte de unirnos con el Espíritu Universal de la Vida.
Muerto el Yo, el Espíritu Universal de la Vida estará en nosotros como una llama en la lámpara.”


Como ya vimos, los sofismas de distracción son producidos por nuestros defectos psicológicos, por el ego, con la finalidad de mantener nuestra conciencia adormecida y así continuar vivo y fuerte, alimentándose de nuestros errores.
Realmente el ego sabe cuándo una persona empieza a ser y a  auto conocerse, a tomar conciencia de que es una marioneta en las manos de los defectos psicológicos, él es herido mortalmente, pues es el principio del fin de su reinado.

Por eso usted puede tener la más absoluta seguridad de que el ego hará lo posible para intentar eludir esta persona, usará todo lo que esté a su alcance para desviarlo del camino del despertar de la conciencia y así mantenerla fascinada y ocupada con las cosas pasajeras de la existencia cotidiana.

Curso de autoconocimiento 10

El Viaje Astral

En esta lección volveremos nuevamente a estudiar el tema del viaje astral y en esta oportunidad aprenderemos nuevas técnicas para hacer el viaje astral en las cuales utilizaremos los recursos que nos ofrecen los mantras y también la concentración en un objeto.

Las técnicas que estudiaremos ahora requieren del practicante una buena capacidad de concentración, por eso es muy importante que usted ya esté disciplinándose y entrenando la concentración, usando, por ejemplo, lo que aprendimos en la lección sobre concentración.

Caso todavía no esté haciendo eso, usted probablemente tendrá mayor dificultad en usar las técnicas de esta lección.
Sin embargo, nunca es tarde para empezar a disciplinarse.

Mantras para el viaje astral.

Un mantra es un conjunto de sonidos que podemos pronunciar (vocales, sílabas o palabras) verbalmente o mentalmente y que, por tener una determinada vibración, producen el efecto deseado.
Los mantras a seguir tienen como efecto hacer el viaje astral:

 •          FARAON

•           LARAS

•           TAIRÊRÊRÊRÊ

•           EGIPTO

Haciendo clic en los nombres arriba puede bajar los archivos de audio con los sonidos de los mantras, para que sean oídos de forma a aprender su correcta pronunciación.
Escuche los mantras cuantas veces crea que sea necesario e intente imitarlos de la mejor forma posible.

Para realizar esta práctica debemos acostarnos en una posición confortable, hacer el relajamiento del cuerpo y después empezar a pronunciar los mantras con mucha concentración, sin pensar en nada más.

Se pueden hacer los mantras algunas veces verbalmente y después pasar a hacerlos mentalmente, repitiendo el mantra indefinidamente hasta atraer el sueño y salir en astral.
Concéntrese solamente en pronunciar mentalmente el mantra, siéntase sumergido en el sonido del mantra. Cuando surgir algún pensamiento simplemente vuelva a concentrarse en la pronunciación del mantra.
Es mucho importante no hacer de esta práctica una repetición mecánica de los mantras, pues así no es posible obtener resultados.

Vea que en esta técnica de viaje astral (y también en la otra que aprenderemos en esta lección) su objetivo es muy diferente de la técnica del saltito.
En las técnicas de esta lección el objetivo no es adormecer inconsciente y después despertar en astral (si bien que eso puede ocurrir también), pero ahora el objetivo es acompañar conscientemente el proceso del viaje astral, percibir el cuerpo astral saliendo del cuerpo físico.

Por eso es que son muy interesantes estas nuevas técnicas que estamos aprendiendo ahora, pues el practicante puede, después de desdoblarse, comprobar muchas cosas más.
Por ejemplo, puede ver su cuerpo físico que se quedó acostado en la cama, flotar en su cuarto, atravesar las paredes de su casa y muchas otras cosas que cada uno podrá ver por sí mismo, y eso es lo que más importa.

Como ahora vamos acompañar el proceso del viaje astral, es normal percibir algunos síntomas que ocurren durante el desdoblamiento, como un “hormigueo” generalizado, el cuerpo físico paralizado y una fuerte vibración.
Todo esto es perfectamente natural y cuando note estos síntomas apenas continúe con los mantras hasta que salga del cuerpo físico.

Concentración en el corazón

Otra técnica extremamente eficiente que es utilizada para realizar el viaje astral es la concentración en el corazón.

Los pasos preliminares son los mismos de la técnica anterior, o sea, acostarse en una posición confortable y dejar el cuerpo bien relajado.
Después el practicante deberá concentrarse e imaginar su propio corazón.
Busque realmente ver su corazón, cómo palpita, cómo es externamente, su color, textura, etc.

No se preocupe si usted no sabe cómo es su corazón detalladamente, simplemente imagíneselo de la forma que cree que sea.
Con la práctica usted verá realmente el aspecto de este órgano ( “el sabio que imagina ve”).

Después de visualizar bien el corazón externamente, entre con la imaginación dentro de su corazón y pase a ver cómo funciona internamente ( de la forma que usted cree que sea).
Cuando esté satisfecho con la investigación interna de su corazón concéntrese más y visualice las células. Después concéntrese más todavía y vea apenas una célula. Imagine hasta el interior del núcleo de la célula.

Haga esta concentración sin prisa y de la mejor forma posible. Procure adormecer haciendo esa concentración.

Usando esta técnica sentiremos los mismos síntomas vistos en la técnica de los mantras. Aquí también usted deberá ignorar estos síntomas y continuar con la concentración hasta salir en astral.

Consejos importantes

  • Es imprescindible practicar las técnicas con concentración para obtener resultados. Recomendamos poner en práctica en su día a día lo que es enseñado en la lección 11.
  • Es fundamental practicar mucho durante el día la auto-observación y la muerte psicológica, pues así, además de todos los otros beneficios, se logra tener más lucidez en las experiencias astrales.
  • Todas las técnicas de esta lección llevan a el viaje astral, pero la técnica de concentración en el corazón es más objetiva, lo que significa que se logra tener resultados mejores y más rápidos.
    Recomendamos practicar esta técnica.
  • Es sabido que practicar durante la madrugada, después de haber dormido algunas horas, es más fácil conseguir el viaje astral porque, además del cuerpo físico estar más descansado (lo que redundará en un sueño más liviano), la atmósfera de la madrugada es también más tranquila y silenciosa. Esto no significa que no se pueda practicar durante el día, caso usted tenga tiempo disponible y un local silencioso para eso.
  • Elija la técnica que más le guste (mantra o concentración en el corazón) y haga con regularidad. Evite cambiar de técnica, pues así es más difícil tener resultados.
  • No cuente a nadie sus experiencias astrales, pues es algo íntimo y dado a nosotros en confianza.

Puede estar seguro que al realizar estas prácticas usted tendrá los resultados deseados.
Muchas personas, usando las técnicas descritas anteriormente, pudieron y continúan experimentando por sí mismas la realidad del viaje astral.
Todo lo que se necesita es tener buena voluntad, práctica y continuidad.

En la próxima y última lección sobre viaje astral veremos cómo podemos ir a determinados lugares en astral y aprenderemos a buscar la auténtica sabiduría en un lugar muy especial.

Vidas pasadas y acontecimientos presentes

Aquí estudiaremos dos leyes mecánicas de la naturaleza a las cuales todos estamos subyugados, y que son responsables por nosotros pasar varias existencias sucesivas repitiendo las mismas cosas, las mismas acciones, reencontrando las mismas personas, etc.
Esas leyes están directamente relacionadas con los hechos de nuestras existencias pasadas y presentes.
Son las leyes de Retorno y Recurrencia.

Abajo veremos un capítulo del libro “Tratado de Psicología Revolucionaria”, de Samael Aun Weor, que nos explica muy bien cómo funcionan estas leyes y lo que necesitamos hacer para transcenderlas:

“Un hombre es lo que es su vida; si un hombre no modifica nada dentro de sí mismo, si no transforma radicalmente su vida, si no trabaja sobre sí mismo, está perdiendo su tiempo miserablemente.
La muerte es el regreso al propio comienzo de su vida, con la posibilidad de repetirla nuevamente.
Mucho se dice en la literatura seudo-esotérica y seudo-ocultista sobre el tema de las vidas sucesivas; mejor es que nos ocupemos de las existencias sucesivas.

La vida de cada uno de nosotros, con todos sus tiempos, es siempre la misma, repitiéndose de existencia en existencia, a través de los innumerables siglos. Incuestionablemente, continuamos en la semilla de nuestros descendientes, esto es algo que ya está demostrado.
La vida de cada uno de nosotros, en particular, es una película viva que al morir llevamos para la eternidad.
Cada uno de nosotros lleva su película y vuelve a traerla para proyectarla otra vez en la pantalla de una nueva existencia.

La repetición de dramas, comedias y tragedias es un axioma fundamental de la Ley de Recurrencia. En cada nueva existencia se repiten siempre las mismas circunstancias. Los actores de tales escenas, siempre repetidas, son esas personas que viven en nuestro interior, los “Yo”.
Si desintegramos esos actores, esos Yo que originan las mismas escenas repetidas de nuestras vidas, entonces la repetición de tales circunstancias sería algo más que imposible.

Obviamente, sin actores no hay escenas; esto es algo irrebatible, irrefutable. Así es como podemos libertarnos de las Leyes de Retorno y Recurrencia, así podremos ser libres de verdad.
Es obvio, que cada uno de los personajes (yo) que en nuestro interior llevamos repita, de existencia en existencia, su mismo papel.
Si lo desintegramos, es decir, si el actor muere, el papel termina.

Reflexionando seriamente sobre la Ley de Recurso, o repetición de las escenas en cada Retorno, descubrimos, por auto-observación íntima, los mecanismos secretos de esta cuestión.
Si en la existencia pasada, en la edad de 25 años, tuvimos una aventura amorosa, es indiscutible que el Yo de tal compromiso buscará la mujer de sus sueños a los 25 años de la nueva existencia.
Si la dama en cuestión solamente tenía 15 años, él “Yo” de tal aventura buscará su amado en la misma edad en la nueva existencia.
Resulta claro comprender que los dos “yo”, tanto de él como el de ella, se buscan telepáticamente y se reencuentran nuevamente, para repetir la misma aventura de la existencia pasada.

Dos enemigos que lucharon hasta la muerte en la existencia pasada se encontrarán otra vez en la nueva existencia, para repetir su tragedia en la edad correspondiente.

Dentro de cada uno de nosotros viven muchas personas llenas de compromisos. Eso es irrefutable. Un ladrón lleva en su red interior una cueva de ladrones, con diversos compromisos delictuosos.
El asesino lleva dentro de sí mismo un club de asesinos y el lujurioso lleva, en su psiquis, una “casa de encuentros».
Lo grave de todo eso es que el intelecto ignora la existencia de tales personas, o Yo dentro de sí mismo y de tales compromisos que fatalmente se van cumpliendo.

Todos esos compromisos de los Yo que viven dentro de nosotros suceden bajo nuestra razón.
Son hechos que ignoramos; cosas que nos suceden; acontecimientos que se procesan en el subconsciente e inconsciente.
Con justa razón nos fue dicho que todo nos sucede, como cuando llueve o cuando truena.
Realmente tenemos la ilusión de hacer, más nada hacemos, nos acontece. Esto es fatal, mecánico.
Nuestra personalidad es solamente un instrumento de diferentes personas (yo), mediante la cual cada una de esas personas (yo) cumple sus compromisos.

Por debajo de nuestra capacidad cognitiva suceden muchas cosas e infelizmente ignoramos lo que pasa por debajo de nuestra pobre razón.
Nos creemos sabios, cuando de verdad ni siquiera sabemos que no sabemos. Somos míseros troncos arrastrados por las furiosas olas del mar de la existencia.

Salir de esta desgracia, de esta inconciencia, del estado lamentable en que nos encontramos, sólo es posible muriendo en nosotros mismos…”